La astronomía, una gran desconocida

Nuestro planeta completamente iluminado sobre un tapiz oscuro. Fotografía tomada por la tripulación del Apolo 17 en 1972 en su viaje hacia la Luna.

Esta entrada la quiero dedicar a una breve reflexión sobre un tema que es muy desconocido para la inmensa mayoría de la gente. Me refiero a la astronomía, un campo que poquitos conocen y no comprenden la importancia que tiene para la sociedad.

En general, cuando alguien dice que es aficionado a la astronomía y algún profano escucha esta afirmación, una gran cantidad de tópicos salen a la palestra. Hay una tendencia a creer que la astronomía es únicamente reconocer las constelaciones en el cielo o saber localizar la Estrella Polar, e incluso sugieren que es considerablemente aburrida ya que solo se ven "puntitos" en el cielo.

Si esto último fuera realmente cierto, desde luego todos los astrónomos aficionados estaríamos para ir al manicomio, porque yo tampoco encuentro diversión alguna en ver unos puntitos por acá y otros por allá. Ese comentario es tan simple como decir que el Guernica de Pablo Picasso son solo unos rayajos. No tiene ningún sentido.

La astronomía es posiblemente uno de los campos más pedagógicos del saber, pues te enseña una serie de valores tan importantes que te permite ver la vida como nunca antes la habías visto. Te enseña a pensar, a ser escéptico (rápidamente aprendes que tus sentidos te engañan constantemente), a valorar la vida, estimula la curiosidad y otra serie de aspectos positivos que ningún otro campo del conocimiento es capaz de transmitir.

El único inconveniente, por llamarlo de alguna manera, es que requiere un cierto grado de abstracción para nada desdeñable y paciencia para comprender los diferentes conceptos. Además, otro requisito indispensable es ser autodidacta, ya que no conozco a ningún astrónomo aficionado que no lo sea. Los he denominado inconvenientes aunque desde mi punto de vista estas cualidades son esenciales para el desarrollo de una buena y valiosa personalidad. No concibo a una persona coherente consigo misma que no sea capaz de reflexionar y con ansias de aprender.

En definitiva, el fallo se encuentra en desvincular la astronomía de nuestro día a día. De esta manera, es imposible comprender un campo tan bonito como la astronomía; no obstante, si sabemos aplicar todos esos valores, que tan presentes están en la astronomía, en nuestra vida diaria, verdaderamente comprenderemos la importancia que tiene y por qué es crucial su conocimiento.

Incluso voy más allá. Una sociedad culta en astronomía es el elixir perfecto para las diversas epidemias que nos azotan actualmente, siendo un método imprescindible para que nos replanteemos el lugar que ocupamos en el universo, la necesidad de ayudar al prójimo y cuidar nuestro planeta, nuestro único hogar. Si consideráramos la astronomía como tal en lugar de unos simples puntitos de luz en el cielo, lucharíamos con mano firme contra las injusticias y desigualdades sociales.

Y cómo no, no podía terminar esta entrada sin antes enlazar estos dos vídeos: